Sr. Chen

Sr. Chen: Misma frescura, menos caretas

Entre nuestras fronteras hemos tenido la suerte de contar con unos pocos artistas que siempre quisieron romper moldes. Y la mayor suerte de todas quizás fue contar con GRIFFI, ese productor que lleva más de 30 años, precisamente, haciendo que los artistas vanguardistas se concentren entorno a él. Un gran ejemplo es Matador Rockers, banda de la que emergió Sr. Chen.

Con un buen puñado de años a la espalda, el de Rubí se ha asentado en la escena nacional como uno de los artistas más multifacéticos. No nos ha sorprendido verle probarse sobre rap, trap, electrónica o sonidos más característicos del R&B. La cuarentena no es que jugase a su favor, pero nos sorprendió con muchísima música, para terminar presentándonos "Cómo No Hacer un Trío", su álbum más reciente.

Derribando las fronteras que podían quedarle, más personales que artísticas, Chen nos trae su álbum más personal. Recopilando todo aquello que creía que nunca iba a contar y presumiendo, una vez más, de conocer la fórmula para mantenerse fresco. Esto es lo que tiene que contarnos.

https://www.youtube.com/watch?v=4hgWRAxrnQ4

Jon: ¡Qué hay Martí! Qué alegría tenerte por aquí, ¿qué tal te encuentras?

Buenas bonico, qué guay poder contestar esta entrevista, estoy bastante bien. Con algo de ansiedad, ya que después de la salida del disco me encuentro con que ya no hay proyectos y soy un “workaholic” de mierda.

Jon: Eso es... ¿bueno? Supongo, jaja. Creo que estarás al día, y ya vendrás preparado. Arranco esta charla como siempre: seguimos en mitad de una pandemia, ¿cómo te ha afectado a ti personal y artísticamente esta crisis global? ¡No sé qué esperar de tu respuesta! Soltaste un disco en plena pandemia, y ahora otro.

Pues me liga muy bien con la pregunta anterior, aparte yo ando pasando la pandemia muy alejado del mundo, en modo ermitaño, así que si no me controlo, me es fácil caer en la sobreproducción para evadirme. Eso puede hacer que no haga temas con sentido, que los haga por pura rutina de trabajo y eso es terrible para el material. Ahora mismo , después de "4Ever Domingo", el disco de Yudi Saint X, "Cómo no hacer un trío", el disco de Yung Rajola y el próximo álbum de Lil Dami, me siento megavacío. Con ganas de vivir un poco hasta que merezca la pena hablar de algo de nuevo.

Jon: Quería que hablásemos de un disco, y ya hemos mencionado 5, sí que debes tener un problema jajaja. Antes de eso, quiero ir al pasado. Muchos crecimos escuchando a GRIFFI, Solo Los Solo y Chacho Brodas... y por supuesto a los que estos trajeron bajo el brazo, como tu grupo Matador Rockers. ¿Cómo nació ese proyecto y de qué forma te educó en la música, qué aprendiste?

Pues de Matador Rockers aprendí un poco la realidad del circuito musical, salir un poco de la peli que nos venden y ver el trabajo que hay detrás. El proyecto nació más o menos de manera natural, aunque ahora con el tiempo también te digo que muchas decisiones que tomaba yo eran fruto del miedo y de querer encajar. Aún así guardo mucho cariño de esos días y sobre todo de mis compañeros de viaje, Lio Ra y Gonne.

Jon: ¿Crees que sin ese amparo de GRIFFI toda tu carrera en la música se hubiese tornado diferente?

Siempre recordaré que con 19 años, habiendo hecho la maqueta de “Bienvenidos a…” con Lio, me dijo que Griffi tenia ganas de conocernos y para mí eso fue un momento muy impactante, ya que Griffi siempre ha sido el arquitecto de casi todos mis temas favoritos del panorama nacional. De manera sutil (es decir, sin darme la tabarra), Javi me enseñó que la técnica no vale para nada si el cuerpo no responde, que la intuición es la que manda a la hora de hacer música.

Jon: Quiero que me seas sincero, ¿crees que Matador Rockers fue un proyecto adelantado a su época, que todo hubiese sido diferente de emerger ahora, por ejemplo?

Bueno, sí y no. Yo considero a Matador Rockers como un grupo bisagra, estábamos entre dos épocas, descontentos con la escena patria en la que no nos sentíamos representados, pero queríamos seguir formando parte de ella. Yo noto que tenía mucho esa energía de “no quedar mal con nadie” y a la vez intentar enseñar unas formas que eran más revolucionarias en aquella época.

Luego apareció toda la ola del trap que directamente negó sus orígenes y parece que esa fue una buena decisión, ya que les ayudó a desmarcarse y ganarse todo ese público que ya no se sentía identificado con el “corsé” que tenían los grupos más a la cabeza en España, que al final eran y siguen siendo una panda de puristas asustados. También lo de la época es muy relativo porque yo recuerdo el sonido que sacaban Foreign Beggars, Oh No o Dabrie y esa era 100% nuestra movida y eran sonidos coetáneos.

Jon: Desde luego que 2020 fue un año de locos. Como decía antes, nos hemos sentado a hablar porque tu decidiste arrancar este 2021 estrenando un nuevo álbum “Cómo no Hacer un Trío”. ¿Qué puedes contarnos del disco?

Pues que llevaba acabado desde antes de "4Ever Domingo", pero no tenía agallas para sacarlo, pues es un disco que para mí es tela de incómodo de escuchar. Es un disco que habla de mi divorcio y donde cargo muy duro contra mí mismo, me desnudo mucho y exponerme de esta manera pues no es fácil. He estado a punto de no sacarlo mil veces, pero al final ha sido un ejercicio de respetar el momento en el que fue escrito y entender que esas emociones tuvieron su tránsito en mí. También me sirve para hacer un poco borrón y cuenta nueva y poder mirar adelante más ligero.

Jon: El título ya dejará a alguno un poco loco. ¡Y la portada termina por rematarlo! Jajaja, desde luego que no conocía la historia detrás. Además decidiste sacarlo el 1 de enero… Tío, de verdad que necesito que me expliques el por qué de crearlo así y sacarlo en ese día tan señalado.

Lo del 1 de enero fue idea de Genís, uno de los chicos de Montebello Agency, que me están ayudando con la salida y para mí tiene mucho que ver con dejar ir esa parte de la que os hablaba y cerrar un ciclo muy manchado por la transformación personal. Aparte para mí es una manera de decir: vale, ahora ya no hay "4Ever Domingo" ni “Cómo no hacer un trío”. Estoy limpio y en paz con el curro hecho, ahora puedo empezar a enseñaros cosas con las que resueno más en este momento.

Jon: Quizás me equivoque y tengas que corregirme, pero mi percepción personal es que: en el Puto Chen, de Matador Rockers encontrábamos mucho “el ego del rapero”, mucho guerreo.  Y descubrimos a un Chen totalmente diferente en “Espero Que te Guste”, más concienzudo y emocional, por decirlo así. Este último disco parece una mezcla de ambos, con mucho cachondeo. Producto de la madurez y la evolución, ¿o solo son fases? 

Totalmente. El Chen de Matador Rockers era todo fachada para encajar, el molar por el molar. Ahora lo pienso y todos los temas de Matador eran puro ego trip y con el tiempo, me doy cuenta de que ser el mejor es algo que no solo es absurdo, sino que no se demuestra diciéndolo sino haciéndolo. Ahora me siento más tranquilo porque con los años, uno se va quitando inseguridades de encima y va viendo que conecta más con la gente cuando es él mismo.

Al final, Matador era un proyecto con otra gente y siempre nos hacemos reflejo cuando curramos con gente, mis discos en solitario son una oportunidad mía para enseñar lo que no enseño cuando llevo la armadura puesta.

Jon: El proyecto guarda un sinfín de estilos diferentes, lo que tampoco nos ha pillado por sorpresa. Desde siempre te hemos visto probarte sobre toda clase de ritmos. ¿De dónde viene todo eso? Hay muchos artistas que escuchan de todo, pero trabajan un abanico pequeño, ¿crees que es cuestión de derribarse fronteras?

Al final me miro en la gente que siempre me ha inspirado y para mí lo realmente divertido está en la variedad. Hace unos años te habría dicho que uno tiene que desafiar siempre el sonido establecido y estar siempre en la brecha de la modernidad para estimular al género. Pero ahora mismo… eso me da un poco igual, me estimula lo diferente porque lo que ya he hecho, pues ya lo he hecho. Al final con lo que me quedo es con esa sensación de yonki que tengo en el estudio cuando estoy haciendo algo que no he escuchado nunca.

Jon: Porque tú has rapeado, has hecho R&B, mucha electrónica, incluso sonidos más pop. Uno de los mejores ejemplos es ‘República’. ¿Crees que esa fusión tan grande te abre a un gran público, de diferentes sonidos, o hace que tu música se disgregue llegando a menos gente en el foco de los géneros? 

Con Dami también nos pasa un poco eso, la movida del género y la etiqueta y cada vez está más difuso todo. Donde le llamamos urbana a todo aunque Tangana te saque un bolero. Tiene que ver (a mí parecer) con la industria y la radio creo. La peña va donde esta la emoción y donde se sienten identificados y menos solos.

El género solo es una elección más a la hora de querer transmitir una emoción o una idea. Claramente es algo que no me ha beneficiado nunca y siempre me he sentido poco rapero para los raperos, poco calle para los del trap y poco indie para los del indie. Así que siempre he estado un poco en tierra de nadie. Pero bueno, al final pienso en que no debo ser el único que siente en tierra de nadie y eso ya es formar parte de algo, ¿no?

Jon: Abriendo un poco el prisma, sí que te quiero preguntar sobre tu casa, sobre Catalunya. En el disco de 2020 sí que te rodeaste de más de 15 artistas, pero bien es cierto que vienes manteniendo mucha química con tus paisanos Lil Dami y Mi.Amargo. ¿Cómo nace esa hermandad?

Pues al final por cercanía y visión supongo, no se sabe muy bien por qué, pero tú como artista gravitas hacia unos artistas y con otros directamente no hay feeling. Para mí colaborar es un pilar básico de mi música y con Amargo y Dami siempre ha sido algo estimulante.

Jon: Alguna vez ya has manifestado que el nivel del país ahora mismo está muy alto, sin embargo, de Barcelona, de Terrassa, de Rubí, de Girona… No dejan de salir talentos año tras año desde hace cerca de 40, ¿qué crees que es lo que alimenta esa masía de talento inagotable?

Pues tío, te voy a ser sincero, siempre hay esa frase de que aquí hay mucho talento emergente y cohesión pero no veo escena por ningún lado. Ojo, que me voy a poner boomer, pero llevo ya más de 10 años haciendo música, he currado con muchísima gente y no tengo sensación de escena, nunca. Puede parecer que lo diga como algo negativo pero últimamente también estoy reflexionando mucho sobre el tema y me doy cuenta de que la idea de “escena” es algo que no crean los propios músicos sino más bien la gente que rodea estos (prensa, discográficas, etc).

Para mí, al final, lo que me ayuda a estar tranquilo con esa idea es pensar que yo soy mi propia escena y que la gente con la que curro es porque hay buen feeling o negocio de por medio. Ya se encargará alguien de ponerle un nombre a la escena catalana para sacarle rendimiento.

Jon: Los últimos años allí han sido de mucha tensión. Yo siempre he criticado que los artistas de España no se mojan, respecto a nada. ¿Crees que los artistas catalanes sí lo estáis haciendo? ¿O crees que deberían hacerlo más, o que simplemente no hay ninguna necesidad de hacerlo?

Muy buena pregunta, estoy contigo. Es tremendamente incómodo y arriesgado mojarse porque el público te penaliza. Yo tengo mil inseguridades por mostrar mi cuerpo porque siento puta vergüenza de tenerlo o de estar calvo y hablar de ello es abrir una ventana a lo incómodo y lo incómodo cuesta seguidores. No solo seguidores, sino que los propios medios tampoco hablarán de ello porque es incómodo y también sienten esa presión.

Es un pez que se muerde la cola. Estos últimos dos años que he estado más cerquita de grupos que tienen más exposición o radios fliparías con la de decisiones que se toman para ser modernas sin ser arriesgadas. Últimamente, por ejemplo, veo a muchos hombres heterosexuales cis coquetear con lo que socialmente se define como femenino y parece que eso te da vía libre para tener exposición sin que hagas un análisis profundo de por qué estás haciendo eso. O seas el primero en seguir siendo un machista de mierda en tus comentarios. O no tener ningún tipo de sensibilidad a las persones trans por poner un ejemplo.

Al final es lo de siempre, la camiseta del Che Guevara, ¿sabes? El titular sin el trabajo de fondo y así el problema, pues sigue estando ahí. Solo que con otro rostro. Aparte que no nos damos cuenta de cómo invisibilizamos a todos los colectivos que llevan haciendo esto desde hace años pero parece que si no lo hace la persona normativa de turno, eso no se debe empoderar porque altera el status quo.

Jon: ¿Qué consejo le darías al Chen de “Esto Tenía que Pasar”?

Uf, muy buena. Realmente ninguno. Que aprenda de cada hostia que le espera (que van a ser muchas) y que cada vez estará más en paz con lo que él es realmente. En lo musical le diría que aprender teoría musical siempre le hará bien y que se sienta orgulloso de lo que es él sin compararse con el resto.

Jon: Tengo que darte mucho las gracias por este rato en GRINDIN’, ¡gracias de verdad Chen!

A ti. Me das una buena vibe increíble y te veo megaenfocado. Saludos y ojalá coincidir algún día. Un fuerte abrazo.

Fotografías: Elena Codes

 

Recuerda que puedes escuchar el álbum ‘Cómo no hacer un trío’ de Sr. Chen a través de su perfil en Spotify:

https://open.spotify.com/album/2lZWrL4AgEnblMCNlJCRsD?si=hZ0ovWiARyKKhCAF3BLZbw


Griffi

Griffi: La frescura eterna

Hubo un tiempo en el que el panorama nacional, al completo, estaba en guerra. La lucha eterna se guardaba entre dos bandos: la vieja y la nueva escuela. Esto se debía a que los jóvenes talentos del país veían el otro bando como un conjunto de artistas acaparadores, que no permitía su entrada en la industria.

Sin embargo, no todo es blanco y negro. Y por supuesto que también había artistas que mucho se alejaban de esa pelea, y que podían permitirse desencasillarse MUCHO de ambos bandos.

Uno de esos abanderados es Griffi. El productor de Tarrasa ganó mucho renombre en España en la época de los 90's, gracias a su flamante trabajo como integrante de Sólo los Solo. Después de redefinir por completo el sonido del rap en España, el también DJ nunca dejó de experimentar y de sorprendernos gracias a su proyecto Chacho Brodas, el cual sigue asentando los cimientos de las nuevas tendencias del rap en nuestro país.

https://www.youtube.com/watch?v=Gskb91QF8sY

Jon: ¡Qué hay Griffi! ¿Qué tal, cómo te encuentras?

¡Muy bien! Con muchas ganas de que mi nueva mandanga llegue a la gente en estos FCKNG tiempos que vivimos para intentar hacerlos más llevaderos.

Jon: Es que venimos de una, y estamos viviendo otra situación exceptual, y de lo más rara. ¿Cuál es tu situación actual y cómo estás viviendo esta loca pandemia?

Pues yo vivo en el campo y el confinamiento fue llevadero en algunos sentidos, pero al final nos dimos cuenta de que esta mierda nos estaba afectando de diferentes maneras a tod@s... Si pienso muy fuerte me preocupa mucho...

Jon: Como estandarte de Sólo los Solo, ya te asentaste como uno de los padres de la movida. A día de hoy, sigues trabajando muy duro. ¿Qué 3 cosas son las que ves más diferentes de cómo era la escena por comienzos de los 90’s y ahora en los 20’s?

Bueno, a principios de los 90’s sí había algún rapero en tu ciudad, lo conocías seguro, ahora no creo que puedas conocerlos a todos... ¡Hemos conquistado el mundo!

Ahora hay más información y más medios para conocer música y hacerla.

Jon: Hay algo que os distingue a muy, muy pocos. Mayormente lo he escuchado de ti y de Tote King, y es que ambos sois las piezas que más frescas os mantenéis en el género. ¿Cómo lo haces? ¿Qué truco hay?

La música, como cualquier forma artística va progresando y cambiando y no me imagino adulando un sonido concreto de una época concreta todo el tiempo... Sería como comer lentejas all the time, yo me considero un músico de hip-hop que no pertenece a una época concreta, porque en mi cabeza siempre es progresivo, siempre hay una dirección clara desde el principio.

Hay que entender el hip-hop como una música que siempre suena a nuevo porque no deja de cambiar y ahí está el diamante y lo que me motiva. Por eso nunca me lleve demasiado bien con los guardianes del medievo rap o de cualquier normativa a la hora de fluir. Esto es arte y no tiene límites.

Aunque también entiendo a las nuevas generaciones, que recrean el sonido de los 90’s porque no lo vivieron y la verdad es que tiene mucha energía y un groove donde está gran parte de la esencia… pero me aburro mucho.

Jon: Hablando de compañeros en la escena. Lo que más nos flipa de ti a muchos es precisamente esa ausencia TOTAL de miedo a experimentar. Y mezclar el rap con flamenco, con electrónica, con reggae, bossa… con todo. ¿Sientes que se te ha llegado a entender dentro del panorama nacional? ¿O que más de uno ha torcido el morro?

Para mí es la esencia máxima del hip-hop, piensa que solo el hecho de samplear cualquier canción o sonido de otro artista o cosa, y hacer una canción nueva a partir de ahí ya es  experimental y transgresor. Ese es el inicio de todo y desde ese punto hay una infinidad de posibilidades que han dado paso a tantos estilos diferentes.

Así que estaba cantado que iba a samplear todo lo que pudiera hacer especial y reconocible mi música, por supuesto empecé a experimentar con flamenco allá por el 95-96.

De hecho, el primer single de Sólo los Solo, ’Pues Cómo no’ llevaba un sampler flamenco que conducía todo el beat.

Pero tampoco quise ser el grupo del flamenco-rap y con los Sólo nos quedaban muchos estilos que queríamos trabajar así que lo aparqué hasta hace poco… Siempre ha habido gente apoyándonos y es por eso que llevo más de 20 años en el rollo, pero si este país me pillase el rollo de verdad, debería estar forrado ya. Porque soy un hijo puta de culto. 

Jon: ¡Desde luego que sí! Jajaja, pero amtes que eso eres muy buen productor, ¿eres también un buen vidente? ¿Qué crees que llegará cuando la ola del trap desaparezca en el mar?

No tengo ni idea, pero la música negra nunca defrauda, así que espero una evolución constante de eso mismo y disfrutar mucho por el camino.

Jon: Principalmente te he pedido que te sientes a charlar conmigo, ¡porque hay nuevo disco de Chacho Brodas! ¿Qué puedes contarnos de ‘Back To the Fucking Party’, ¿cómo nace el proyecto?

¡Fue el Bla-De! Yo andaba currando con Duddi (Duddi Wallace), y haciendo nuestras movidas, pero hablando de hacer algún proyecto. Bla-De dijo: “...¡CHACHO ! ♥️ A partir de ahí nos pusimos a trabajar y salió “BTTFP”.

Jon: La verdad es que es un buen culo inquieto, jajaja. Eso sí, han sido 8 años de larga espera hasta que has retomado el proyecto de Brodas, ¿qué te ha tenido dejarlo un poco a un lado este tiempo y qué te animó a retomarlo?

Después de “PROZAK” necesitaba un cambio de aires y decidí hacerme una casa ecológica en el campo y hacerme un estudio más grande. Eso me llevó 2 años, el resto del tiempo he estado haciendo sonar el nuevo estudio, experimentando con nuevos sonidos, aprendiendo nuevos estilos y formas, etc... Así que siento que nunca he parado de hacer música, no sé si podría dejarlo así, que no me queda otra. No hay más. 

Jon: Eso es así, no has estado para nada parado. Te hemos visto, como siempre, muy bien acompañado de Bambax, Samuel O’Kane… Y liderando al equipo Delpalo, ¿no?

Es eso, la música es un proceso sin fin y trabajar con gente nueva siempre abre puertas en tu cabeza. Y DelPalo pasó a ser un colectivo cooperativo para darle dinamismo y actualmente trabajamos en equipo varios entusiastas de la música.

Jon: Para esta nueva referencia ‘Back To the Fucking Party’ has contado con talentos más jóvenes, aunque muchos conocemos ya muy bien. Como Bla-De, Juanih, Lauren o Pepe y Vizio. ¿Crees que esa visión para colaborar con artistas que otros de tu quinta ignoran es fundamental para mantener esa frescura?

Llevo mucho tiempo esperando generaciones más abiertas musicalmente, así que es algo natural para mí. Y creo que si ahora ya estoy currando con gente más joven que mi hija, haré hits con los hijos de los veinteañeros con los que curro hoy. Porque esa es mi mierda.

Un ejemplo Vinnie Dollar, lo que hago con este fenómeno no lo hubiese podido hacer hace 10 años. A veces no te queda otra que viajar en el tiempo para encontrarte con los tuyos.

Jon: Por cada disco de Chacho Brodas pasan un buen puñado de artistas, de mil estilos. ¿Cómo se trabaja un álbum así?

En realidad lo difícil es encontrar tu equipo de trabajo, luego va saliendo todo de manera orgánica, pero siempre hay que meterle horas y amor.

Jon: Muchas gracias por compartir este rato conmigo Griffi, de verdad. ¡Un fuerte abrazo!

El placer ha sido mío al comprobar que no todos los medios especializados en este país ahora funcionan igual.

Normalmente veo con decepción que muchos de estos perfiles funcionan como el de cualquier YouTuber chickenhead que solo buscan el hype fácil y los likes. Y cuando intentan escribir algo decente se les nota que no tienen ni puta idea. 

La cultura necesita ser apoyada de verdad, entender de dónde viene y difundirla, no paripes como lo del otro día de la fotito roja y demás… Si los medios de tu país ya no dan la talla en ese sentido es difícil que los gobiernos hagan algo real que vaya a salvar la cultura. El otro día los de FleekMag, por ejemplo, diciendo que el origen del track ‘Marcha’ de PEPE:VIZIO era de Lolita. Cuando es de Peret... Y dudo mucho que sepan ni quién soy. De hecho, seguro que este es uno de los discos del año y la mayoría de medios no tienen ni idea.

Por suerte, no todo es igual gracias a medios como vosotros 🙏🏽🙏🏽🙏🏽 Abrazo grande.

Fotos: Javier Fernández

Recuerda que puedes escuchar toda la música de Griffi y Chacho Brodas a través de su perfil en Spotify:

https://open.spotify.com/album/0sOhvvxUhpQByx9eYvH9tO?si=6Gd-XwgmS96a1KatGLD27g